Los inversionistas son emocionales, no racionales. Entonces, ¿qué dirige las decisiones financieras que toman? Uno de los cursos del plan de estudios que toman los corredores de bolsa de Wall Street. Entienda por qué es que se pierde plata.
Dentro de sus cursos de preparación y sus exámenes de certificación hay un módulo que se dedica a comprender el comportamiento financiero de los inversionistas y entender el por qué de las decisiones que toman. Estas siete maneras de cómo el cerebro le hace perder dinero, son una recopilación del plan de estudios del CFA y le servirán para controlar sus impulsos y tomarse un tiempo para pensar antes de invertir.
Creer que es el que más sabe de inversión
El exceso de confianza es el comportamiento más evidente en todos los tipos de inversionista compulsivo. Recuerde que antes de tomar cualquier decisión sobre dónde poner su dinero debe evaluar diferentes aspectos además de la rentabilidad. Además recuerde que en todo lo que tiene que ver con dinero siempre estará en desventaja el que tenga menos información. Siempre existe el riesgo que quien tenga menos información sea usted, entonces trate de reducir el riesgo consiguiendo toda la información que más pueda y no se quede sólo con lo que usted cree saber.
Creer que el pasado es un indicador del futuro
Que una inversión, fondo, compañía o cosa anuncie que obtuvo en el pasado grandes ganancias no quiere decir que dará los mismos resultados después. Este comportamiento financiero se conoce como representatividad. Otro ejemplo de esto es asumir que una buena compañía es una buena acción.
No saber cómo utilizar la nueva información
Si bien usted debe tomar sus decisiones iniciales con la mayor cantidad de información disponible en ese momento, es importante que cuando tenga nueva información no tome decisiones apresuradas pero que si la incorpore en su análisis para transformar lo que espera que pase con su inversión. No ancle en sus expectativas pues esto le hace perder dinero.
Negarse a materializar las pérdidas
No querer por ningún motivo perder o aceptar una pérdida, puede ser mortal. La mejor decisión después de haber perdido parte de su capital por un movimiento adverso del mercado, es asumir la pérdida y seguir adelante.
Sin embargo, lo que suele pasar es que en vez de materializar la pérdida, compra una porción más grande de la misma inversión. Este comportamiento se puede comparar con el de un jugador que hace muchas apuestas con la esperanza de recuperar lo perdido y alcanzar el punto de equilibrio. ¡Grave error!
Atormentarse por los errores del pasado
Suele pasar que cuando una persona compra una acción y después de ver que su precio ha aumentado un 20% decide vender y al ver que la acción continúo en aumento empieza a culparse y a pensar que si se hubiera esperado tendría mayor rentabilidad. El ejemplo describe el mejor escenario, pero el caso contrario es peor, haber vendido para materializar una pérdida y que el precio de la acción repunte.
Entonces, para minimizar este sentimiento y no generar arrepentimiento por cada decisión que toma, lo mejor es invertir según su perfil de riesgo y desde un principio fijarse límites de ganancias y de pérdidas.
Cambiar la tolerancia al riesgo según la dirección del mercado
Su capacidad de tolerar el riesgo debe estar determinada por circunstancias y sentimientos financieros personales, su horizonte de tiempo y el tamaño de la inversión. Que su disposición a asumir riesgos aumente cuando el mercado va hacia arriba, lo llevan generalmente a comprar caro y vender barato. ¿Buen negocio?
Tener siempre una buena excusa para no aceptar su equivocación
Las excusas están directamente relacionadas con el exceso de confianza y eso con la pérdida de riqueza. Acepte que cuando las inversiones no dan los resultados que espera, tuvo que haberse equivocado en algo y lo mejor es que pueda identificarlo para en un próximo negocio no cometer el mismo error.